Nuevamente la Universidad de Atacama (UDA) se ve envuelta en otra situación irregular, en donde un funcionario estaría eventualmente vulnerando su vínculo laboral y abandonando sus funciones con la casa de estudios, para tratar pacientes en una clínica privada, en su horario laboral.
De acuerdo a la denuncia emitida en la Contraloría, un médico, ex Director Servicio de Salud Atacama y actual decano de la facultad de medicina de la Universidad de Atacama ha incurrido presuntamente en varias irregularidades en torno a su vínculo laboral actual con la UDA para tratar pacientes en una institución de salud privada: «De conformidad a lo prescrito por el artículo 56 de la ley N° 18.575, todos los funcionarios tienen derecho a ejercer libremente cualquier profesión, industria, comercio u oficio conciliable con su posición en la Administración del Estado, siempre que con ello no se perturbe el fiel y oportuno cumplimiento de sus deberes funcionarios, sin perjuicio de las prohibiciones o limitaciones establecidas por ley. Estas actividades deberán desarrollarse siempre fuera de la jornada de trabajo y con recursos privados. Sobre el particular, agrega que las letras a) y d) del artículo 61 de la ley N° 18.834, dispone, en lo pertinente, que son obligaciones de cada funcionario desempeñar personalmente las tareas del cargo en forma regular y continua, así como cumplir la jornada de trabajo. Luego, el inciso primero de su artículo 65 dispone que la jornada ordinaria de trabajo de los funcionarios será de cuarenta y cuatro horas semanales distribuidas de lunes a viernes, no pudiendo exceder de nueve horas diarias».
A su vez, en la denuncia se expresa que: «El Señor Emilio Ríos Cid ha (presuntamente) vulnerado gravemente, y reiteradamente el principio de probidad administrativa, al realizar durante la jornada contratada en Universidad de Atacama, consultas médicas privadas en Clínica RCR Atacama, según se documenta, al menos desde las 14.30hrs todos los días, teniendo una resolución de directivo superior de la mencionada Universidad, en jornada completa. No es menos cierto, que no presenta marcación en su jornada de salida, resultando del todo irregular, como se acreditará».
Ante esto, la Contraloría oficio a la Universidad de Atacama en dar respuesta a la denuncia en contra del funcionario: «Pase a la Universidad de Atacama, la presentación bajo reserva de identidad del recurrente, adjunta al presente oficio, para que en conformidad con lo dispuesto en el artículo 9° de la ley N° 10.336, se sirva informar a este Organismo de Control al tenor de lo expuesto por el recurrente, en un plazo de 10 días hábiles administrativos, contados desde la total tramitación del presente oficio. La información deberá ser preparada con intervención de la Asesoría Jurídica o abogado de esa entidad, a menos que el asunto planteado sea ajeno a la aplicación o interpretación de normas jurídicas o reglamentarias o que ese organismo no cuente con ese profesional. Además, deben remitirse todos los antecedentes necesarios para resolver adecuadamente la presentación de que se trata».
