Una nueva polémica azota al fútbol chileno, esta vez, el sindicato de jugadores SIFUP acusó a la ANFP de no fiscalizar a Deportes Copiapó.
Esto debido a que el presidente de Deportes Copiapó, Luis Galdames junto a los directivos del club estarían cobrando por la indumentaria que deben ocupar los jugadores en las juveniles.
De acuerdo a una publicación que se viralizó en rrss del club, la directiva informó a los apoderados de los jugadores de las series cadetes del club que deberían pagar por la indumentaria deportiva de entrenamiento. En donde, se les solicitó el pago de dicha indumentaria con el pretexto de ser “parte esencial de la imagen institucional y el desarrollo de los jóvenes talentos”.
En el comunicado enviado por Galdames, se informa que: “Ya se encuentra disponible el kit oficial de entrenamiento para nuestros jugadores de series menores Sub 20-18, Sub 14-13 y Femenina Juvenil. Este implemento será obligatorio para todos los integrantes de nuestras categorías formativas, siendo parte esencial de la imagen institucional y el desarrollo de los jóvenes talentos. El kit puede ser adquirido en la tienda oficial del club, ubicada en calle Verdugo #338, en el siguiente horario de atención: de lunes a viernes desde las 09:15 horas a las 14:00 horas, y desde las 15:15 horas hasta las 18:00 horas. Precio del kit: $119.900 talla adulto y $95.900 talla niño”, agrega el dirigente en la misiva, donde requirió “a los apoderados acercarse a la brevedad para efectuar la compra correspondiente y así asegurar que cada jugador cuente con la indumentaria oficial requerida”.
Ante esto desde el Sindicato, golpearon la mesa acusando “malas prácticas como esta de los dirigentes de Deportes Copiapó en el fútbol formativo las hemos denunciado en innumerables ocasiones a los mandamases de la ANFP, Pablo Milad y Jorge Yunge, pero se hacen los desentendidos”.
De acuerdo a un comunicado, expresaron su molestia en contra los directivos: “Todas las SADP reciben un importante monto mensual por los derechos de TV, en el caso de Copiapó son más de 100 millones de pesos. Es responsabilidad del club entregarles la indumentaria, seguro de accidentes y la infraestructura necesaria a jugadores de todas sus series. Lo más inmoral de esta medida, de cobrarle a los apoderados la ropa deportiva para representar al club, es que en el futuro los dirigentes recaudan grandes cifras por los derechos formativos (USD 30.000/año) de estos mismos jugadores a los cuales les están cobrando por defender al club. Además, muchas veces dejan de contar con ellos, pero no les entregan la libertad de acción para que puedan continuar con sus carreras deportivas en otras instituciones. No más abusos en el fútbol chileno”, finalizaron.
