Escrito por Rebeca Salinas, Concejala y candidata a Alcaldesa por la comuna de Caldera.
El 29 de junio se conmemoró el día Nacional de la Pesca Artesanal, conmemoración que se hace relevante destacar en nuestra comuna, ya que es la principal fuente laboral de las familias Calderinas.
Pero lamentablemente, y por malas prácticas en la política en nuestro país, que rayan en la corrupción, producto de la famosa ley de pesca o ley Longueira, no se puede conmemorar del todo.
Los pescadores de mi comuna llevan una década luchando por hacer justicia en la pesca artesanal, ya que la Ley sigue siendo la misma.
Recordemos que esta ley se creó en el primer Gobierno de Sebastián Piñera, bajo el liderazgo de Pablo Longueira. Una ley que se aprobó gracias al soborno de legisladores y que consagró la explotación sin freno del océano, por parte de las familias más privilegiadas del sector pesquero industrial del país.
Este día, en la actualidad es más bien un saludo a la bandera, literalmente, un reconocimiento vacío, ya que las condiciones laborales de los pescadores artesanales no han cambiado. La ley no ha cambiado, ya que se debería asignar mayor fraccionamiento a los gremios y una mejor plataforma social que proteja a los pescadores artesanales.
En la actualidad, existe una lentitud en el proyecto para anular la actual legislación, en la comisión de Constitución del Senado, donde se encuentra sin mayores avances desde el 2022. Además, el Ministerio del Mar es un compromiso que no se concreta y que solucionaría gran parte de las necesidades del sector de la pesca y acuicultura.
Mi compromiso está con nuestra gente y su progreso.